Una pareja de ancianos, el Sr. y la Sra. Fournier, se encuentra en el centro de una feroz batalla legal de millones de euros debido a la venta de una antigua máscara africana que heredaron del abuelo del Sr. Fournier. La máscara, de gran valor espiritual para el pueblo gabonés, fue vendida por 150 euros en septiembre de 2021, sin que la pareja supiera su verdadero valor en el mercado del arte.
El abuelo del Sr. Fournier, René-Victor Edward Maurice Fournier, había sido gobernador colonial en África Central a principios del siglo XX, y la máscara fue heredada de él. En un giro inesperado, la máscara se vendió por 4,2 millones de euros unos meses después, lo que desencadenó una batalla legal.
La pareja alega que el comerciante que les compró la máscara ocultó deliberadamente información sobre su origen y que planeaba dividir las ganancias con su jardinero, quien proporcionó información sobre los vínculos de los Fournier con el gobernador colonial.
El gobierno gabonés ha intervenido en el caso, argumentando que la máscara fue robada por el antepasado de los Fournier y que nunca fue legítimamente propiedad de la pareja. Gabón ha presentado un caso judicial separado para que la máscara sea devuelta a su país de origen.
La máscara en cuestión data del siglo XIX y pertenecía a la sociedad Ngil, que administraba justicia en las comunidades Fang de Gabón. Según Sotheby's, las máscaras Ngil son extremadamente raras y valiosas en el mundo del arte africano.
La batalla legal ha atraído la atención de la diáspora africana en Francia y ha generado debates sobre la restitución de artefactos coloniales a sus países de origen. El presidente francés, Emmanuel Macron, ha expresado su deseo de que se establezcan condiciones para la restitución del patrimonio africano a África, aunque hasta la fecha, solo unos pocos objetos han sido devueltos.
El tribunal de Alès, en el sur de Francia, está evaluando la petición del gobierno gabonés de suspender el procedimiento actual para que se resuelva el caso de la máscara Ngil. Se espera que el tribunal emita su decisión el 19 de diciembre. La identidad del comprador de la máscara sigue siendo desconocida.
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