La mañana del jueves 7 de diciembre, varias ciudades del Litoral ecuatoriano fueron sorprendidas por lluvias, contradiciendo parcialmente las predicciones del Comité Nacional para el Estudio Regional del Fenómeno de El Niño (Erfen).
Aunque este organismo alertó sobre lluvias de variable intensidad en Ecuador desde la primera semana de diciembre, las precipitaciones ya se han hecho presentes en algunos sectores.
Según el Erfen, el pronóstico se centra en el norte e interior del litoral, el callejón interandino que atraviesa la Sierra, la Amazonía y la región insular. El Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi) ha emitido alertas en todo el país por lluvias, tormentas y fuertes vientos, vigentes hasta el 8 de diciembre.
Las lluvias experimentadas el 6 y 7 de diciembre en el Guayas y otras regiones confirman las predicciones, y se espera que persistan al menos hasta la noche del 8 y 9 de diciembre.
Luis Fernando Morales, segundo comandante del Instituto Oceanográfico y Antártico de la Armada del Ecuador (Inocar), confirmó la activación del Fenómeno del Niño a nivel nacional el 18 de septiembre. Según él, los modelos estadísticos indican que este fenómeno durará hasta mayo de 2024.
El director del Inocar, Carlos Zapata Cortez, explicó que el cambio de alerta de amarilla a naranja se basó en cuatro criterios establecidos en la fecha de confirmación del fenómeno, es decir, desde el 18 de septiembre. Aunque las lluvias no fueron inmediatas, Zapata destacó que son la última manifestación del fenómeno natural.
Franklin Ormaza, oceanógrafo de la Escuela Politécnica del Litoral, enfatizó que El Niño no se limita a las lluvias y señaló el aumento constante de la temperatura en Ecuador, con implicaciones en la salud y en las pesquerías debido al calentamiento del agua.
Edwin Pinto, director en Ecuador de la Comisión Permanente del Pacífico Sur (CPPS), confirmó que el evento El Niño ya está en marcha desde hace meses, y se espera un énfasis en las lluvias a partir de la segunda semana de diciembre. Pinto pronostica condiciones cálidas del mar y lluvias más intensas hasta el primer trimestre del próximo año, coincidiendo con la temporada lluviosa normal del Litoral pero con mayor cantidad de precipitaciones debido al fenómeno natural de El Niño.
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