Un nuevo estudio revela que tomar siestas durante el día puede ser beneficioso para la salud del cerebro a medida que envejecemos. Investigadores del University College de Londres (UCL) y la Universidad de la República de Uruguay encontraron que la práctica habitual de la siesta se relaciona con un mayor volumen cerebral total, lo que se asocia con un menor riesgo de demencia y otras enfermedades. Sin embargo, investigaciones anteriores han demostrado que dormir siestas con exceso de frecuencia o duración puede ser perjudicial.
Un estudio publicado en marzo de 2022 encontró que los adultos mayores que dormían la siesta al menos una vez al día o más de una hora al día tenían un mayor riesgo de desarrollar Alzheimer en comparación con aquellos que no dormían la siesta o lo hacían menos tiempo. Además, investigaciones posteriores encontraron que las personas que duermen siestas con frecuencia tienen más probabilidades de desarrollar hipertensión arterial y sufrir un accidente cerebrovascular.
Sin embargo, se destaca que el estudio tiene limitaciones, como el hecho de que los hábitos de siesta se autodeclararon. A pesar de esto, los resultados son interesantes y respaldan la idea de que el sueño es importante para la salud del cerebro. Los investigadores utilizaron una técnica llamada aleatorización mendeliana para analizar muestras de ADN y escáneres cerebrales de más de 35,000 personas de entre 40 y 69 años, y encontraron una asociación entre ciertos genes relacionados con la siesta y un mayor volumen cerebral.
Aunque se reconoce que el estudio tiene limitaciones, se considera un aporte importante para comprender la relación entre la siesta y la salud cerebral.
Tomar siestas cortas durante el día podría ser una pieza clave para preservar la salud del cerebro a medida que envejecemos, pero se necesitan más investigaciones para comprender completamente los beneficios y los riesgos asociados con esta práctica.
コメント